- Inseguridad, falta de agua potable, ingobernabilidad y corrupción, común denominador de la administración galindista
- Viajes es lo que más abunda en la agenda del alcalde más andariego en la historia de San Luis Potosí
Este gobierno municipal del alcalde viajero, Enrique Galindo Ceballos, superó todas las marcas de administraciones anteriores, pero en inseguridad, desgobierno, falta de agua, falta de infraestructura, corrupción y saqueo de las finanzas municipales, es, sin lugar a dudas, de los peores gobiernos municipales que ha tenido San Luis Potosí en los últimos 15 años y es mucho decir después de Xavier Nava.
Enrique Galindo, que ha dado prioridad a los viajes dentro y fuera del país con dinero de la ciudadanía, encabeza un gobierno elitista, desarticulado, indolente y muy alejando de la problemática que enfrentan diariamente casi un millón de personas que viven en la capital potosina.
INSEGURIDAD
En la campaña electoral de 2021 Enrique Galindo prometió devolver la paz y la tranquilidad a los potosinos echando mano de su currículum se describió como el “súper policía”. Sin embargo a pesar de los millones de pesos invertidos en Seguridad, la estrategia de seguridad ha demostrado ser ineficaz y errónea. En aprobación ciudadana la Policía Municipal de Galindo está muy por debajo de la Guardia Civil, la Guardia Nacional y el Ejército.
En redes sociales abundan los videos en que se demostró la corrupción que existe al interior de la tropa. Policías robando, extorsionando y atracando son una constante en la Policía de Galindo. Encabezan los escálalos policiacos: Francisco Olvera, ex director de la Academia de la Policía Municipal, atropelló a un estudiante de secundaria y amenazaron a la familia para condicionar el pago de gastos médicos a cambio de otorgar el perdón para el uniformado; el subinspector Manolo Balderas administraba un predio donde organizaba bailes sonideros hasta que una balacera acabó con el negocio clandestino luego de la muerte de varias personas; recientemente salió a la luz la falta de reacción y pericia de los uniformados que se vieron superados por un ebrio conductor al que no pudieron detener y atropelló a una mujer a la que le causó la muerte.
Según datos del INEGI, 8 de cada 10 potosinos considera inseguro vivir en la capital potosina, y datos de Semáforo delictivo muestran que la extorsión, narcomenudeo y violencia familiar son los principales delitos del fuero común que se cometen en la ciudad, seguidos por lesiones y violación y, aunque está en semáforo verde, se registraron 142 robos de vehículos, 37 robos a vivienda y 61 robos a negocios.
FALTA DE AGUA POTABLE
A raíz de que se anunció que la Presa El Realito dejaría de suministrar agua potable a la capital potosina, Galindo desplegó una campaña mediática en la que invirtió varios millones de pesos para anunciar que la capital potosina estaba en crisis, que el día cero había llegado y el agua se había agotado.
Desde ese momento y a la fecha ha dispuesto de más de 300 millones de pesos de libre disposición sin que se hayan dado cuentas claras del uso y destino.
Se rehabilitaron 35 pozos que nadie sabe dónde están ni cuántos son, mucho menos a cuántas personas benefician. Se firmaron contratos millonarios por la renta de pipas cuyos propietarios son funcionarios del propio Ayuntamiento, sin embargo el agua no llega a las viviendas, las pipas de Galindo no se ven por ningún lado.
La crisis evidenció lo que todo mundo ya sabía: el INTERAPAS es ineficiente, inoperante e ineficaz, lo que lleva a que el 50% del agua que se suministra a la red hídrica se pierda en fugas que el organismo se niega a reparar.
MALA INFRAESTRUCTURA
Enrique Galindo entregó la Dirección de Obras Públicas del Ayuntamiento a la mafia de constructores de Nuevo León que financiaron su campaña a la alcaldía de la capital potosina. Les ha entregado contratos para la pavimentación de más de 644 mil metros cuadrados de asfalto de apenas 5 centímetros de grosor que no han superado la prueba del tiempo pues a los pocos meses ya presentan baches y hundimientos. Por mucho que lo anuncie, la capital potosina no es cuarta ciudad más iluminada del país, pues contando las delegaciones de la Ciudad de México, la capital del sí ocupa el lugar 25 con lámparas que se funden constantemente.
La colocación de mil semáforos inteligentes ha demostrado que una vez más el alcalde viajero miente, pues las recién estrenadas luces no están sincronizadas, no están conectadas a una central y, lo peor, excluyó a peatones ya que no hay por ningún lado semáforos que den el paso a las personas.
INGOBERNANZA
Enrique Galindo se dio a la tarea de rescatar a la “herencia maldita”, en su gobierno dio cabida a priistas que acabaron con su partido político, que traicionaron a los ex gobernadores y desfalcaron al pueblo potosino. Dando cabida a las dos fuerzas políticas que lo llevaron al poder, el pleito entre priistas y panistas no se hizo esperar, ganando territorio los tricolores que desplazaron a los blanquiazules.
La falta de tacto político han llevado a Galindo a enfrentarse públicamente con su lideresa Sara Rocha y en Ciudad de México, aprovechó la visita a Marko Cortés para despotricar contra la dirigente estatal del PAN, Verónica Rodríguez, del diputado federal Xavier Azuara y del diputado local Rubén Guajardo.
Galindo no tiene un futuro claro en el PRI ni en el PAN, por lo que amenaza con irse a MORENA ya que presume amistad con Claudia Sheinbaum, sin embargo el partido del presidente es aliado del Verde, lo que no le augura una bienvenida con los brazos abiertos.
Aunque Enrique Galindo brinde cifras alegres, positivas y mande reporteros a la mañanera del presidente para golpetear al gobernador Ricardo Gallardo, los resultados del INEGI y Semáforo delictivo lo contradicen y ubican en su debida posición: uno de los peores alcaldes que ha tenido la capital potosina.